Instalación, restauración y venta de revestimientos ligeros. Déjanos asesorarte:
¿Porqué madera?¿Porqué laminado?¿Porqué PVC?.
La calidad de cualquier material depende de forma directa del uso al que se destine. Para el uso domestico, las propiedades que actualmente alcanzan los suelos laminados, hacen que parezca el más idóneo. No obstante, no deja de ser una alternativa de la propia madera.
Si somos objetivos, es más probable que un pavimento de madera pegado obtenga mejores resultados a la humedad que un suelo laminado. Aún mejor comportamiento tienen los pavimentos de pvc.
La sensación de calidez, que se suele buscar en estos pavimentos, es una cuestión de conducción térmica. La madera retiene mejor la temperatura que cualquier otro. Aunque en una vivienda, cualquiera de estos nos dará un resultado idóneo. ¿Cuál es entonces la diferencia?
Principalmente, el envejecimiento. Ninguno de estos tres "principales" envejece de la misma manera. Respecto a la restauración/recuperación, solo dos de ellos la pueden asumir.
La madera:
Para una elección adecuada es necesario conocer las alternativas. En la madera podemos encontrar distintos formatos, tonalidades, diseños, grosores, acabados, sistemas de instalación, etc. en los que podemos orientarnos, principalmente, por el que más nos gusta. En el caso de elegir la madera como suelo, solo quedaría ponerle el acabado más adecuado. Las tendencias actuales han evolucionado hacia los acabados sin brillo.
Redactar en esta página las posibilidades de la madera es imposible. Desde nuestra experiencia solo podemos decantarnos hacia ella para su instalación en viviendas ya que es, en todos los aspectos, superior a cualquier alternativa.
Somos conscientes de su fama de "problemática". Como profesionales del sector sabemos el "porqué" de estos problemas y lamentablemente, la mayoría de las veces, se debe a su instalación. Tener en cuenta todos los aspectos de la instalación, tales como la superficie, la humedad, el adhesivo o sistema de instalación, el acabado y su mantenimiento, es fundamental. La experiencia con la madera suele derivar a dos finales; odiar o amar la madera. Si el asesoramiento ha sido adecuado y la instalación correcta solo hay un final.
Los laminados:
Las alternativas a la madera como la tarima laminada, son opciones más rápidas y baratas. La satisfacción con estos pavimentos dependen, para no variar, de su mantenimiento.
En estas opciones hay poco que estudiar. Elegimos un color y se instala. Evidentemente es un pavimento con unas características propias. La más común, su dilatación. Afortunadamente está absolutamente estudiada y NO es necesario hacer cortes en cada puerta o cada 10 metros como indican algunos fabricantes. Las opciones de diseño, según cada fabricante, son más limitadas, aunque las hay.
Los PVC:
Finalmente, el menos conocido en ámbito domestico, el PVC. En este también podemos encontrar diferentes sistemas de instalación ya que se fabrica en rollo, en losetas de 2,5mm (y otros grosores) y con sistema de click entre otros.
Este pavimento se ha hecho popular para cocinas y aseos por su resistencia a la humedad. Aunque por sus diseños, cada vez más, es la opción preferida para toda la vivienda.
Este tipo de pavimentos pueden ser tratados con productos para la recuperación y reparación de la capa de uso. Esto es un proceso de decapado y encerado con emulsiones y productos que nos ofrecen acabados, con distintos brillos, para que vuelvas a ver tu suelo nuevo.
En resumen, pretendemos que conozcas que no hay límites para que puedas disfrutar de un suelo de la calidad que necesitas. Si quieres más información contacta con nosotros y pregúntanos.